100 años de publicidad en el Metro de Madrid

El Metro de Madrid cumple un siglo desde que se inauguró, allá por el año 1919, concretamente el día 17 de octubre. Inaugurado por el rey Alfonso XIII, el metro de Madrid se ha convertido en la red metropolitana más extensa de España con una longitud de 294 kilómetros y 302 estaciones, la más larga de Europa después de la de Londres y Moscú y la novena del mundo después de la de Shanghai, Pekín, Londres, Nueva York, Seúl, Moscú, Tokio y Guangzhou.

Además, es la segunda red más antigua del mundo hispanohablante, tras la Red de Subterráneos de Buenos Aires. Fue la red que más incrementó su expansión entre los años 1995 y 2007, con un total de 657,21 millones de desplazamientos contabilizados en 2018.

 

UN POQUITO DE HISTORIA…

En las áreas circundantes a la Puerta del Sol ya existía a finales del siglo XIX una gran afluencia de carruajes y de tranvías. Esto hizo que se propusiera la idea de construir la red de ferrocarril metropolitano. En 1914, cuando Madrid ya tenía una población de unos 600.000 habitantes, un grupo de ingenieros presentó un proyecto para construir la red de metro, hablamos de Miguel Otamendi, Antonio González Echarte y Carlos Mendoza. Además, contaron con Antonio Palacios como arquitecto del proyecto, que diseñó las estaciones principales y bocas de metro de Madrid.

El 17 de octubre de 1919 la primera línea de metro, la que cubre el trayecto entre Puerta del Sol y Cuatro Caminos, es inaugurada por el rey Alfonso XIII, con un tremendo éxito que alcanzó los 14 millones de usuarios el primer año. A partir de este momento, el metro de Madrid empezaría a mejorar y expandirse poco a poco hasta nuestro tiempo. Caben destacar actuaciones importantes, como la construcción de MetroSur durante el periodo 1999-2003, y la del metro ligero, así como la prolongación a varios municipios de la corona metropolitana durante el plan del 2003-2007.

 

 

LA PUBLICIDAD EN EL METRO DE MADRID

Desde su creación, el Metro de Madrid ha sido utilizado por las empresas para promocionar sus marcas y productos. A principios de los años 20 ya se podía apreciar como la publicidad exterior había avanzado en complejidad y elegancia. Un claro ejemplo fue la campaña de Fiat para promocionar su último modelo de coche, la cual inundó Madrid de una llamativa cartelería de color rojo. Cabe mencionar que excepto los taxis, todos los vehículos urbanos como los tranvías, trenes y autobuses llevaban publicidad instalada por doquier, incluso en el interior del mismo transporte.

Pero si hablamos de la primera publicidad que la red de metro utilizó, fue la publicidad en azulejos ubicada en las estaciones y pasillos de la red metropolitana. Este tipo de publicidad estuvo presente prácticamente desde que la red de metro fue concebida. Algunos de estos antiguos anuncios todavía permanecen en el metro de Madrid, aunque muchos de ellos ocultos debido a obras posteriores, como el anuncio que se encontró en la estación Sevilla no hace mucho.

 

 

En esos tiempos, el anunciante compraba el espacio publicitario para promocionar su marca, y su anuncio se mantenía ahí de forma permanente, es decir, duraba mientras se mantuviera el azulejo en dicha estación. No fue hasta después de la Guerra Civil cuando se comenzó a utilizar el papel el lugar del azulejo. Además, se empezó a utilizar otro modelo más rentable para contratar los espacios publicitarios: los anuncios se contratarían de forma temporal y se cambiarían de forma periódica.

La publicidad en el metro no solo llego hasta sus instalaciones. En los años 20 los mismos billetes de tranvía contenían ya publicidad referente a campañas enfocadas a la acumulación de billetes usados, con el objetivo de mejorar la memoria de las campañas. Hoy en día todos estos formatos publicitarios se han conservado en esencia con su respectiva modernización. Sin embargo, en este nuevo siglo se han establecido nuevas formas de realizar publicidad en el Metro de Madrid, como los patrocinios de estaciones y líneas de metro. De esta forma las marcas consiguen una mejor visibilidad y el servicio público nuevos ingresos para su propio mantenimiento.

 

En estos últimos tiempos, nuevas tecnologías se han sumado a la publicidad exterior en el metro, como los espacios publicitarios luminosos dentro de los túneles, un tipo de publicidad dinámica que, con el tren en movimiento, crea una ilusión óptica que hace parecer a los usuarios que los anuncios tengan vida propia.

La publicidad exterior digital avanza cada vez más rápido y es muy probable que pronto veamos más sorpresas de carácter tecnológico para mejorar y modernizar todavía más el sector publicitario. Esperemos que sí.